«Yo te bautizo en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo»
Este fin de semana pasado asistí a un bautizo, el cual me hizo pensar sobre el Espíritu Santo y las diferentes formas que es expresado en este sacramento. Porque el Espíritu Santo no solamente se representa como La Paloma, tal como se le apareció a Jesús en su bautismo. Si no además, se simboliza como: Agua, fuego, unción, mano, dedo, sello, nube y luz.
El Espíritu Santo como hemos visto se simboliza de varias formas. Veamos el significado de cada uno en el rito del bautismo:
- La Paloma, como ya hemos visto es la forma como se le apareció a Jesús en su bautizo en el río Jordán. En nuestro bautizo desciende y reposa en nuestros corazones
- En el bautismo la imposición de Manos, puede sustituir la primera unción. Pero es la confirmación la que le da más importancia a las Manos, porque el Obispo invoca el don del Espíritu Santo
- El Agua es considerada la acción del espíritu Santo y significa el nuevo nacimiento, es el momento en que se nos perdonan los pecados y nos unimos a Dios
- La Unción con el Santo Crisma es sinónimo del Espíritu Santo y la señal de incorporación a la Iglesia creyente
- El Fuego significa la luz de Cristo. Es la vela que se enciende del Cirio Pascual
- El símbolo del Sello en los sacramentos es un símbolo cercano a la unción, indicando el carácter indeleble de la unción del Espíritu. Con el bautismo quedamos marcados como con un sello
Es importante que señale que en el bautismo quedamos íntimamente conectados con Dios, y esa conexión nunca desaparece, inclusive aunque hallamos cometido el peor de los pecados. Por que Dios nunca nos abandona después de ser bautizados.
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