Ayuno y Abstinencia

En la iglesia existen dos formas de penitencias básicas: abstinencia y ayuno.

Abstinencia: La ley de abstinencia requiere que un católico de 14 años y hasta su muerte se abstenga de comer carne de mamíferos los viernes en honor a la Pasión de Jesús y durante el Viernes Santo. Lo que está permitido es pescados de agua salada y agua dulce, anfibios, reptiles y moluscos; así como productos derivados de animal como la margarina y la gelatina que no tienen sabor a carne.

Días de Abstinencia Obligatorios: Miércoles de Ceniza, Viernes Santo y todos los días viernes durante la Cuaresma.

Ayuno: La ley de ayuno requiere que los católicos desde los 18 años hasta los 60 años reducir la cantidad de alimento a consumir a la que se está acostumbrada normalmente. La iglesia lo define como una sola comida al día o dos comidas pequeñas que unidas no exceda a una sola comida. El ayuno se rompe si se come entre comidas y tomando bebidas que se pueden considerar comidas, tales como: merengadas y jugos; la leche no se considera.

Días de Ayuno Obligatorios: Miércoles de Ceniza y Viernes Santo.

Exentos de Abstinencia y Ayuno: Los enfermos, con problemas mentales, frágiles, mujeres en cinta, obreros con trabajo que requieren mucho trabajo físico o cualquier impedimento que no les permita observar la disciplina penitencial.

Hoy en día podemos practicar la abstención, sustituyéndola por un sacrificio, pero este sacrifico depende de lo que dicten las Conferencias Episcopales de cada país, para esto te sugerimos que consultes al párroco o sacerdote de tu iglesia.