En cada necesidad, déjame venir a ti con humilde confianza, diciendo:
¡Jesús, ayúdame!
En todas mis dudas, perplejidades y tentaciones:
¡Jesús, ayúdame!
En horas de soledad, cansancio y pruebas:
¡Jesús, ayúdame!
En el fracaso de mis planes y esperanzas, en decepciones, problemas y penas:
¡Jesús, ayúdame!
Cuando otros me fallan y solo Tu gracia puede ayudarme:
¡Jesús, ayúdame!
Cuando me lanzo en Tu tierno Amor como Padre y Salvador:
¡Jesús, ayúdame!
Cuando mi corazón es derribado por el fracaso, al no ver nada bueno venir de mis esfuerzos:
¡Jesús, ayúdame!
Cuando me siento impaciente y mi cruz me irrita:
¡Jesús, ayúdame!
Cuando estoy enfermo y mi cabeza y mis manos no pueden funcionar, y me siento solo:
¡Jesús, ayúdame!
Siempre, siempre, a pesar de la debilidad, caídas y deficiencias de todo tipo:
¡Jesús, ayúdame! y nunca me abandones.
Amén.
Lecturas sugeridas:
- 15 Minutos de Adoración”
- ACTO DE AMOR
- ACTO DE CONTRICCIÓN
- ACTO DE ESPERANZA
- ACTO DE FE
- OFRECIMIENTO MATUTINO
- Oración A Mi Ángel Guardián
- Oración a San Miguel Arcángel
- Oración Para Bendecir Los Alimentos
- Oraciones Al Levantarse Y Al Acostarse
- Oraciones Cortas Para Rezar Durante El Día
- Oraciones para después de comulgar
- PARA REZAR EN TODO MOMENTO
- Yo Confieso