«Comparte con nosotros cómo lo haces»
Estamos a casi dos meses que lanzamos este blog y podcast, debo confesarles que no ha sido fácil por todo el trabajo que requiere. Una cosa es cierta, que todo el tiempo que hemos invertido ha valido la pena; y esperamos continuar mejorando cada día más. Es por eso que todo lo que tengo que hacer para el blog más mi trabajo de día, me deja muy poco tiempo muchas veces para cumplir con mi objetivo y mantener un horario cada día a la misma hora para dedicarlo a una oración. ¿Es falta de planificación por mi parte?, bueno planificamos el día desde el punto A al punto B, y muchas veces terminamos en un laberinto que nos desvía involuntariamente; de tal forma que ¡a mí también me cuesta! Me imagino que a ustedes le pasa lo mismo, pero permítanme compartir mi experiencia. Cuando uno se encuentra en ese laberinto y por ejemplo nos vemos importunadamente en la posición de ajustar nuestro horario y prioridades, me tomo un minuto o dos para decirle algo a Dios. Y, esto lo voy haciendo varias veces durante el día. Creo que esto le gusta mucho más a Él, cuando estamos en el laberinto, porque suspendemos todo por segundos y lo consideramos… ¿qué le digo?, ¡cualquier cosa! Todo depende de la situación o el momento ¡lo que primero se te ocurra!… una cosa que puede ser cierta es que tal vez al final, el tiempo dedicado en pequeñas fracciones fue mayor al planificado; pero esto es sólo si ¡estamos en el laberinto!
«Comparte con nosotros cómo lo haces»