Usualmente vengo con mi hijo al gimnasio, pero hoy es diferente; porque vine con él pero sin hacer ejercicio, por haber cenado demasiado. Así que me vine preparado: me traje la computadora y a estar dispuesto a esperarlo en el café del gimnasio.
No pensaba escribir para el blog, ya que quería más bien navegar por el Internet; pero empecé a pensar lo que es venir a este sitio con un propósito diferente al de hacer ejercicio. Cuando uno viene hacer ejercicio, no se da cuenta de la cantidad de gente y de la diversidad de las personas que vienen, prácticamente con el mismo objetivo: “mantenerse en buenas condiciones físicas y por consiguiente saludable”. Pero como este es un artículo para el blog rezaconmigo.com, me dije: “¿cómo puedo yo relacionar esta experiencia con los temas de este blog?”
La dedicación, motivación y constancia es lo que se les ve a todas estas personas. Es una experiencia ver cómo entran con energía, frescos y animados. Muy distinto a cuando salen: agotados y sudados, pero relajados – ¡Que maravilla!. Entonces, cómo puedo yo comparar lo que veo en este gimnasio con el tiempo que dedicamos, para mantenernos en buenas condiciones espirituales y por consiguiente con buena salud del alma; necesarias para lograr las mejores condiciones para la vida después de la vida. El tiempo que podemos dedicarle a esa gimnasia espiritual; mucho o poco. Se nos va a transformar, no en mayor masa muscular o energía. Pero si, para nosotros los católicos, en mejores condiciones para alcanzar la felicidad en la vida eterna.
La experiencia ha sido muy buena, por eso la quise compartir con ustedes. Los dejo porque ya ha llegado la hora de buscar a mi hijo y regresar a casa. Un último pensamiento, vivamos la vida plena y feliz, disfrutando todos los momentos (buenos o no muy buenos) pero sin olvidar que debemos extender esa vivencia de disfrutar a plenitud en la vida eterna. ¿Cómo me preparo para ese momento?, es cuestión mía; sí se, que nadie lo puede hacer por mí, sólo yo. ¡Así lo pienso yo, y me hace sentir más relajado!
Fotos de: aquí.
