El día 15 de agosto celebramos la Asunción de la Santísima Virgen María a los cielos. Pero, ¿cuál es la diferencia entre Asunción y Ascensión? Desde el punto de vista etimológico son totalmente distintos, según el diccionario de la Real Academia Española, ascensión es: acción y efecto de ascender (a un sitio más alto); y asunción es: acción y efecto de asumir. Ahora, ¿qué significan para nosotros los Católicos estos dos acontecimientos? Para Iglesia la Ascensión de Jesús y la Asunción de la Virgen María son muy diferentes en cuanto a forma. Sin embargo, ambos coinciden en que son acontecimientos de “Amor”.
La diferencia de forma es que Jesús ascendió por sí mismo y la asunción de la Virgen María fue llevada acabo por Jesús. Es fácil comprender el hecho de que Jesús siendo la Segunda Persona de la Santísima Trinidad tiene el poder para ascender por su propia voluntad. No obstante, es también factible entender que la Virgen María no tenía este poder y necesitó asistencia para ser llevada al cielo; y quién más que Jesús para llevar a su madre al cielo. Como se indica en una tradición: “María advertida de su final en la vida terrenal, por el Arcángel San Miguel, quien conduce las almas al cielo, fue rodeada en su lecho de muerte por los apóstoles, que fueron transportados milagrosamente a su lecho desde sus diversos lugares que estaban llevando acabo su misión. Cuando se le apareció Jesús para llevar su alma, y luego regresó tres días después a su entierro, para con los ángeles llevarse el cuerpo al Paraíso, donde se reunió con su alma bajo el Árbol de la Vida”. Es por esto que cada 15 de agosto celebramos la festividad de que María felizmente partió de esta vida por su muerte natural, y fue asunta en cuerpo y alma al cielo.
Como he dicho anteriormente, estos dos sucesos coinciden en que son hechos de “Amor”. Esto lo indico porque la Ascensión de Jesús fue la culminación de su gran Acto de Amor; el haber muerto por nosotros en la Cruz. La Asunción es también un Acto de Amor porque Jesús por amor a su madre se la llevó a la Gloria Celestial, “para ser exaltada por el Señor como Reina sobre todas las cosas, así que ella pueda ser conformada más plenamente a su Hijo” [Catecismo de la Iglesia Católica, 966]. La asunción es también un “Acto de Amor” hacia nosotros, porque viene a ser un anticipo de lo que todos los creyentes seremos sometidos al final de los tiempos. En otras palabras, la Asunción de María es una nuestra de nuestra propia asunción corporal cuando se termine el mundo.
Sugerencias para celebrar este día:
- Colocarle flores a cualquier imagen de la Virgen que tengamos en casa.
- Rezarle la oración dicha por la Virgen María, el Magníficat.
- Hablar con los niños de lo que significa este día.
- Rezarle a la Virgen (se sugiere los Misterios Gloriosos del Rosario), para que siga intercediendo por nosotros y si tienes una necesidad este es un buen día para pedirle. Pero, recuerda también darle gracias por cualquiera intersección recibida.
- Encender una vela en la iglesia y si andas con los niños invítalos a que cada uno encienda una.
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