Durante el mes de junio, ha sido tradición en nuestra familia la de honrar, venerar y recordar al Sagrado Corazón de Jesús. El mes lo iniciamos colocándolo en un lugar preferente en la casa, en nuestro caso es el salón. El objetivo es de adornarlo con flores y rezarle un rosario todos los días, pero durante los nueves primeros días del mes realizamos la novena, con el fin de ganar las 12 gracias prometidas por Nuestro Señor.
Es junio es también el mes del año, donde en la mayoría de los países celebramos el Día del Padre. Un día muy especial para nosotros los padres y nuestros familiares, cuya primera celebración se llevó a cabo el 19 de junio de 1910, tercer domingo del mes; en Spokane, Washington. Esta festividad se la debemos a Sonora Smart Dodd, quien después de escuchar un sermón sobre el Día de la Madre, inició una campaña para promover la celebración del día del padre. Esta idea fue recibida con aceptación en mucha ciudades de Estados Unidos y fue, en 1924 que el presidente Calvin Coolidge hizo del Día del Padre una celebración nacional. Pero fue en 1966, que el presidente Lyndon B. Johnson firmó la proclamación declarando el tercer domingo del mes de junio como Día del Padre en los Estados Unidos. Hoy día esta celebración se lleva a cabo en casi todo el mundo, pero en algunos países de Latino América se celebra en diferentes fechas.
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